Yo Te Sostendré

Estaba de pie frente al vasto océano con los ojos llenos de miedo, mientras las olas chocaban sin piedad en la costa. El muro de agua se levantaba mucho más alto que lo que yo medía a  mis 10 años de edad , y yo no quería entrar, estaba segura que terminaría arrastrándome y hundiéndome en una profunda oscuridad.

 

Pero, al otro lado de las olas, podía ver a mis tías, tíos y primos todos reunidos en un círculo, con sonrisas en sus rostros. De algún modo, habían vencido al monstruo de agua. Obviamente, tenían más valentía que yo. Deseaba estar con ellos, pero mi cuerpo entero temblaba. De ningún modo, pensé. Esta miedosa se quedará aquí y jugará en la arena. 

 

Empecé a arrodillarme, derrotada, cuando una fuerte mano tomó la mía. Volteé y miré al rostro sonriente de mi padre. “¿Qué esperas mi niña? Es un gran día para nadar”.

 

De pronto, me sentí arrastrada con la fuerza de su movimiento. Nos movimos a través de las olas. Cuando me hundía, él me levantaba y me mantenía a flote. En poco tiempo, estaba segura entre el oleaje y disfrutando con mis seres queridos. ¡Cuan grande alegría me habría perdido de no haber confiado en la mano de mi padre!

 

 Últimamente me he encontrado en una costa diferente y enfrentando otro obstáculo. Confieso que me ha dado miedo el avanzar. Las olas de la tribulación han sido despiadadas, pero sé que perderé la gran bendición que Dios ha preparado si no confío en que Él me mira a través de todo esto. 

 

El profeta Isaías escribió al pueblo de Dios, quienes vivían en el exilio en otro país. Lejos de casa y profundamente desanimados, el pueblo de Israel se sentía débil e indefenso. Dios mismo les dijo:

 

“Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.”  Isaías 41:13

 

Vamos a recordarnos estas verdades hoy mientras luchamos por mantener la fe: 

 

  • Dios es nuestra fuerza cuando somos débiles. No tenemos que ser fuertes. Su fuerza superará cualquier obstáculo. 
  • El Todopoderoso ha prometido que nos sostendrá cuando no podamos hacerlo por nosotras mismas. No debemos temer por si somos o no capaces. Dios mismo los levantará. 
  • El Creador que formó el universo controla nuestro destino, y sus planes para nosotros no pueden ser deshechos por el enemigo. 

  

 

Amiga, nuestro Padre celestial quiere tomarte de la mano y guiarte a través de la dificultad que estés pasando. No des lugar a la derrota. Tú eres una hija de Dios, y Él nunca te dejará ahogar en el descontento. Permite que Él te guíe hasta el otro lado, donde encontrarás un gozo sin medida. ¿Qué esperas? Confía plenamente en Dios y sumérgete en la abundante vida que Él ha planeado para ti. 



Lyli




Lily

Estudio Bíblico Relacionado

Recibe nuestras actualizaciones

Recientes