No te dejes engañar con mentiras

Las cartas que Juan escribió son cartas densas, con muchas doctrinas profundas, advertencias, exhortaciones  aliento. Una de las razones es que todos los apóstoles, excepto Juan, ya estaban muertos. Él era el último de los apóstoles, razón por la cual muchos eruditos creen que la “última hora” se refiere al final de la era apostólica. Otros creen que la frase “última hora” también se refiere al tiempo entre la resurrección de Jesús y la segunda venida. Estaríamos viviendo en “la última hora”.

Uno de los problemas que la iglesia encontró durante este tiempo fue el de los falsos maestros o “anticristos”. Ahora bien, esto no se refiere a esa figura que tendrá mucho poder y engañará a mucha gente. Aquí, la palabra “anticristos” se refería a aquellos que estaban enseñando mentiras acerca de Jesús, y lo hacían con pasión y persuasión. Eso es lo que significa “anticristo”, contra Cristo o contra el Mesías, y en los días de Juan había más de uno. Este término no se usó para personas que simplemente se equivocaban en algunas cosas menores en su enseñanza. Estos “anticristos” estaban enseñando intencionalmente cosas completamente contrarias a lo que enseñan las Escrituras acerca de quién es Jesús y lo que hizo.

¿Cuáles eran algunas de las cosas que estaban enseñando?

Estos falsos maestros o “anticristos” negaban, entre otras muchas cosas, la deidad de Jesús. Ellos no creían que era el Redentor y Salvador del mundo. También negaban que Jesús hubiera venido del Padre, y en cambio decían que era un ser creado. Algunos incluso creían que no fue Dios el Padre quien creó el mundo, sino los ángeles.

¿Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este es anticristo, el que niega al Padre y al Hijo.  1 Juan 2:22

 

…y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo. 1 Juan 4:3

 

Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Quien esto hace es el engañador y el anticristo.  2 Juan 1:7

Podríamos pasar mucho tiempo discutiendo todas las cosas peligrosas que esta gente estaba enseñando, pero también hallamos lo mismo en nuestros días.  Las personas religiosas conocen todas las palabras correctas y están enseñando algo peligroso porque es contrario a lo que la Biblia realmente dice. Puede parecer que saben de lo que están hablando, pero predican un evangelio falso, uno que es peligroso porque evita que la gente mire a Jesús como su esperanza de salvación.

La forma en que nos protegemos de maestros dinámicos, bien hablados pero peligrosos es conociendo nuestras Biblias. ¡Ármate con la verdad!

No sigas ciegamente lo que otros dicen, compáralo con la palabra de Dios para asegurarte de que sea correcto. No te dejes llevar por ideas tontas, nuevas, o falsas enseñanzas, no importe lo bien que te hagan sentir. Nuestros sentimientos no siempre son precisos y nuestro corazón es engañoso y no podemos confiar en él.

Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso  Jeremías 17:9

¡Conoce tu Biblia! ¡Léela, estúdiala, ora acerca de lo leído, discútelo con otros, y léela nuevamente!

Cuanto más conozcas la verdad más fácil será detectar la mentira y permanecer firme en tu conocimiento y fe en Dios

 

Mirando a Jesús,

Jen

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