Gracia y Misericordia en Plenitud

 

 

Encontrando Refugio en Dios

 

Hebreos 4:14-16 es uno de mis pasajes favoritos de la Biblia. Expresa sucintamente el corazón y los pensamientos de Dios para nosotras. No sirvo a un Dios que no se preocupa por mí o a uno que sólo me necesita para sus ganancias personales y placeres perversos. ¡No! Sirvo a un Dios, de hecho, soy hija de un Dios que sabe muy bien lo que se siente ser inadecuado y débil y cómo superarlo. Sirvo a un Dios que se preocupa tanto por mí que me está haciendo más a imagen de Su Hijo. No está esperando a que falle para castigarme. Por el contrario, conoce íntimamente todos mis caminos por Su profundo amor por mí. Ese es el Dios bajo cuyas alas hemos venido a refugiarnos querida amiga.

 

Este maravilloso don de la gracia no se puede comprar con dinero. No, Jesús lo compró con Su sangre. ¡Anímate con esta increíble verdad! Mientras escribía este blog en mi computadora portátil, la computadora portátil comenzó a funcionar mal, aparentemente de la nada. Tuve que usar mi teléfono para completar este blog. Así que estoy tan segura en mi corazón ahora que Dios quiere que leas este mensaje de gracia para seguir adelante. Amén.

 

En esos momentos en los que estamos aturdidas por la vida y sentimos que nos ahogamos, tenemos acceso, creado para nosotras por Jesús, para acercarnos al trono de gracia de Dios. En este lugar, podemos confiar en que seremos escuchadas y atendidas. No se burlarán de nosotras por nuestra fragilidad, debilidad o impotencia. Querida amiga, podemos acercarnos al trono de la gracia porque recibiremos misericordia. Es la misericordia que necesitamos cada día y la gracia siempre que la necesitamos.

 

 

 La Asombrosa Gracia de Dios

 

La Gracia es un favor inmerecido que nos permite vivir la vida que Cristo dio por nosotras. La Gracia dice, “Ella no es merecedora, pero puede venir” La Gracia dice, “Di mi vida por ella.” La gracia de Jesús entiende nuestras insuficiencias y debilidades. La Gracia encuentra que Jesús es la razón por la que podemos tener la oportunidad de pelear en contra de cada debilidad y no pecar. ¡Qué asombroso regalo!

 

Mi querida hermana, una vida de gracia en Cristo es a lo que hemos sido llamadas.  Es una vida en donde Él lidera y nosotras lo seguimos. Es una vida fluyendo con el suministro de la energía del Espíritu Santo para vivir sobre el pecado y las trampas de este mundo, es una vida para honrarlo a Él y solamente a Él. Caminar diariamente en esta realidad.  No permite que el diablo te diga que estás sin ayuda. Es una vida en la cual tenemos una sobreabundante ayuda en Cristo

 

 

Acércate al Trono de la Gracia

 

¿Necesitas ayuda? Acércate al trono de la gracia.

 

¿Estas batallando? Acércate al trono de la gracia.

 

Simplemente acude a Dios en oración. Él te enviará ayuda, en él encontrarás misericordia y gracia en  tiempos de necesidad.  No te alejes de Dios.  No escuches el engaño del enemigo. Tienes más que  suficiente ayuda en Cristo porque Él entiende  en donde estás tú ahora. Alabemos al Señor.

 

Dios te bendiga

 

Ebos

 

Semana 6 – Desafío 

Escoge una forma cada día de expresar exteriormente tu fe. Esto puede ser  a través de una conversación acerca de tus creencias, haciendo un voluntariado por una causa que te apasione o simplemente mostrando gracia y paciencia en situaciones retadoras. Reflexiona cómo estas acciones profundizan tu fe e impacta aquellos alrededor de ti.

 

 

Semana 6 – Plan de Lectura

 

 

 

Semana 6 – Versículo a Memorizar

 

 

 

 

 

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